Ey, ¿qué tal estás? ¿Te ha entrado el gusanillo de hacer el Proceso KonMari™ o acabas de llegar al blog? Si es así, te voy a dejar el enlace al primer y al segundo artículo sobre cómo ordenar la categoría de los libros para que tengas toda la información a mano. En esos artículos te explico todas las claves desde como organizar la sesión de trabajo, qué entra dentro de la categoría de libros, cómo seleccionarlo y algunas cuestiones más que te pueden ser de ayuda durante tu proceso. Nos paramos en el momento en el que tienes realizada toda la selección de los libros que quieres mantener, y a partir de ahora te explicaré como ordenarlos.
Ahora si ¿estás preparada? ¡Vamos a ello!
Se supone que tanto el proceso de seleccionar como de ordenar libros los tendrías que hacer en una misma sesión o de un sólo golpe. Como era mucha información yo lo he dividido en tres artículos pero, en principio, si las circunstancias te lo permiten, para ti debería ser una sola jornada de trabajo. Igual que en la ropa, cuando acompaño los procesos personales de mis clientas, una única sesión suele ser suficiente para los libros. Para que te hagas una idea las sesiones suelen durar unas 5 horas, pero como probablemente lo vas a hacer por tu cuenta, es mejor que cuentes con un poco más de margen. Si por el contrario, por la razón que sea, no puedes hacer la sesión de trabajo continuada, intenta organizarte para poder hacer 2 sesiones de 3 horas, por ejemplo.
Lo importante es que en cualquiera de los casos, si vas a trabajar por tu cuenta, te lo tomes con la misma seriedad que si lo hicieras conmigo (o con cualquier otra profesional). Es decir, agenda una fecha y un horario concreto en el que puedas trabajar al menos 3 horas seguidas. Ese día libera tu agenda de compromisos y delega las responsabilidades en otra persona (cuidado de lxs peques, mayores, mascotas etc.). Este rato que estás reservando, es un tiempo de cuidado para ti misma, para tu autoconocimiento y bienestar. Además, colateralmente beneficiará a todas las personas que conviven contigo. Así que durante ese ratito, apaga el móvil, comprométete contigo misma y ¡a trabajar!
PRIMERO SELECCIONA, DESPUÉS ORDENA
Se supone que en este momento ya has echo la selección de los libros que te hacen feliz, los que realmente te representan y necesitas tener a tu lado. Ahora es el momento de ordenarlos y verás que es muy sencillo. La premisa principal es que todos los libros tienen que estar guardados en el mismo sitio, por lo tanto, en una misma librería o estantería. De esta manera, cada vez que necesites un libro no tendrás que perder el tiempo buscando por toda la casa. Luego veremos que hay algunas excepciones en esta categoría, pero no nos adelantemos.
Un recomendación que suelo hacer a la hora de ordenar los libros en la estantería es que cada persona tenga su propia balda o espacio personal. De esta manera, además de ser más fácil mantener ordenados los libros, cada persona tendréis vuestro propio espacio para organizarlo según vuestras necesidades.
Respecto a cómo colocar los libros, seguiremos utilizando el sistema vertical. Esta es la manera más sencilla de poder ver todos tus libros y, cogerlos y guardarlos de manera cómoda. Te recomiendo que todos los libros estén colocados en una sola fila (que no haya libros detrás o encima), así con un solo golpe vista puedas ver todo lo que tienes. Si eres de tener muchos libros, probablemente después de haberles pasado el detector de felicidad habrás reducido el volumen evitando así los problemas de espacio.
Ten en cuenta que los más recomendable es que las estanterías o cajones estén llenos máximo hasta el 80%. Esto permite que puedas mover los libros con facilidad. Además, a nivel visual no se verá abarrotado y aportará calma a tu mirada (y a tu alma también☺️😉), tu vista estará reposada.
En cuanto al orden de los libros podría haber diferentes formas de organizarlos. Te voy a poner tres ejemplos, pero como siempre, te animo a que sigas tu intuición y los coloque de manera que te hagan más feliz:
- Ordenarlos siguiendo las subcategorías que te propuse a la hora de hacer la selección. Dentro de esas subcategorías los libros deberían ir por bloques. Por ejemplo: primero podrías poner los libros generales. En ese bloque irían todas las novelas juntas, los ensayos después, los libros de poesía, y por último la novela gráfica. Seguido podrías poner la subcategoría de libros de referencia siguiendo su temática. Finalmente, los libros visuales.
- Otro sistema podría ser ordenarlos por tipo de libro (novela, ensayo, teatro, temáticas concretas etc.) y por orden alfabético del autor/a.
- Podrías ordenarlos también por colores y tamaños. Este sistema a los que han estudiado literatura o biblioteconomía les parece un horror, jeje, pero visualmente funciona muy bien.
A la hora de colocar los libros, ten en cuenta también que algunos libros cumplen doble función, transmitir información y ser un elemento estético. Estos últimos, los puedes colocar de manera más visible para que te aporten un extra de felicidad. En todo caso, como siempre, la mejor referencia que puedes tener es escuchar lo que te dice tu corazón.
En el caso de los libros encuadernados con anillas (los que suelen dar en los cursos o los ebook que has impreso en papel) te recomiendo que los pongas al principio de la estantería o si los has ordenado por temáticas al principio de ese bloque. Estos libros-cuadernos no suelen tener suficiente consistencia para mantenerse por si mismos, de modo que los demás libros servirán de sujeción y se verá todo ordenado.
CASOS EXCEPCIONALES
Como te comentaba hay algunas excepciones a la hora de colocar los libros. Los libros de cocina son uno de ellos. A pesar de que yo personalmente prefiero tener todos los libros en la estantería (también por una cuestión de cuidado y limpieza), los libros de cocina podría ir perfectamente en la cocina. Eso sí, tendrás que encontrar un sitio en el que estén cuidados (lejos de salpicones) y que no te molesten ha la hora de cocinar o recoger la cocina.
Otra excepción podrían ser los libros específicos que tienes en la oficina o en el despacho. En este caso, si el volumen es pequeño, yo personalmente sigo prefiriendo guardarlos junto a los demás aunque de vez en cuando tenga que desplazarme para cogerlos. Pero, igualmente, podrías darles un lugar propio es tu lugar de trabajo.
DESECHAR LIBROS
Tirar libros es algo que en general nos cuesta mucho a todas las personas. Sin embargo, cuando hablo de desechar no estoy hablando necesariamente de tirarlos al container de reciclaje. Existen diversas alternativas a la hora de deshacerte de tus libros. Te voy a mencionar algunas, aunque sería interesante que investigues qué alternativas hay en tu zona, ya que las opciones puede cambiar radicalmente dependiendo del pueblo, la comunidad o el país en el que vivas.
Las opciones que he encontrado yo son:
– Donarlo a las bibliotecas. Yo he trabajado durante varios años en una biblioteca, y por desgracia, la realidad es que estas están saturadas de donaciones. En muchos casos, solo aceptan libros de gran calidad, los que son difíciles de encontrar o escritos en idiomas extranjeros.
– Participar en propuestas como bookcrossing. Explicado de manera muy resumida sería dejar libros en diferentes puntos de tu ciudad (siempre dentro de una bolsa de plásticos o en lugares protegidos) para que otra persona lo encuentre y pueda disfrutar de ello. Te dejo el enlace, donde encontrarás toda la información:
– Donarlo a diversas asociaciones o a la caridad. Sin embargo, muchos de ellos tienen el mismo problema que las bibliotecas. A pesar de que normalmente recogen los libros, en muchos casos, estos quedan almacenados y olvidados en el depósito.
– Venderlos en páginas y tiendas de segunda mano. Actualmente, especialmente en la red, existen varias plataformas en el que vender libros de segunda mano, estos son algunos ejemplos:
– Donarlo, regalarlo o sortearlo en las redes sociales
– Si tienes algún libro especial que creas que pueda hacer feliz a una persona concreta, también puedes regalarlo. Pero te pido que pongas mucha conciencia en lo que estás haciendo, no cargues a otra persona con objetos porque tú no quieras asumir tu responsabilidad.
Como ves, hoy en días es un poco más complicado deshacerte de tus libros. La consecuencia directa de la compra excesiva de libros, junto al hecho de que las casas sean más pequeñas, la necesidad de poner orden en casa y la aparición de los libros electrónicos, es que no hay soluciones perfectas. veaces, no hay más remedio que tener que tirarlos.
Y entonces, ¿qué puedes hacer tú? Pues mi recomendación es que pongas mucha atención cada vez que vayas a comprar un libro y que reflexiones profundamente sobre la necesidad real de comprar o las consecuencias a largo plazo, no sólo para ti sino para el resto del planeta. Después de haber trabajado en una biblioteca, y conociendo el sistema de préstamo inter-bibliotecario (esto existe en todas partes), me parece absurdo comprar libros constantemente. Te puedo asegurar que mediante este sistema es posible conseguir prácticamente cualquier libro. Por su puesto, tiene sus limitaciones pero las consecuencias son menos graves que comprar sin conciencia.
Pero no me malinterpretes, con esto no quiero decir que no puedas comprar ningún libro. Para mí personalmente es un gran placer adquirir algún libro de vez en cuando, pero pongo mucha conciencia en aquello compro. De todos modos, te aseguro que cuando termines esta categoría y tengas que dejar ir los tuyos, en cierto modo es tan traumático (incluso obsceno), que te cambiará radicalmente la forma de comprar.
NO CAIGAS EN ESTA TRAMPA
Me siento obligada a hacer esta advertencia, ya que yo misma y la mayoría de mis clientas hemos caído en esta trampa mental. Y es que con la idea de encontrar la mejor solución para nuestro libros, los dejamos en stand-by en casa. Te puedo contar varias situaciones diversas: “mientras consiga venderlos los dejaré apartados en esta caja”, “hasta que pueda llevarlos a la biblioteca los guardaré en esta habitación”, “estoy esperando a poder donarlos, pero mientras…” etc.
¡Hazte un favor y no te cuentes milongas como lo hice yo conmigo misma! Deshazte de tus libros lo antes posible, ese mismo día o semana a poder ser. Sino corres el peligro que los libros descartados queden atascado en tu casa o que sientas la tentación de recuperarlos. Si no lo ves claro hazte estas preguntas:
- ¿Me hace feliz ver mis libros abandonados en cajas?
- ¿Me aporta algo esta energía estancada?
- ¿Verdaderamente estoy respetando mis libros y a mí misma?
DISEÑA TU ESPACIO IDEAL
Vale, ahora ya sabes exactamente qué libros tienes y cuántos, ¿verdad? ¿Seguimos jugando? Te propongo que diseñes el espacio ideal para tus libros. Puede que en este momento no dispongas de los recursos económicos para poder comprar la librería de tus sueños, pero no importa. Mi propuesta es que juegues, imagines, dibujes… cómo sería es espacio. Estoy segura que tienes millones de recursos al alcance de la mano, desde papel y bolígrafo hasta programas de diseño. Además, como te decía en la categoría de ropa, tu capacidad creadora es ilimitada.
En este momento no importa que sea realista, confía que esto llegará con el tiempo. Mientras juega, prueba, modifica, prueba diferentes disposiciones… los mejores descubrimientos se han realizado a a base de “fracasar” muchas veces. Por lo tanto, el fracaso ya no es ningún fracaso, sino un paso indispensable en el camino.
¡Pero sobre todo disfruta! El festival del orden es una oportunidad maravillosa para autoconocerte y poner en valor todo lo que te rodea.
Un abrazo fuerte.