¿Te gustaría ordenar los libros de tu casa pero no sabes por dónde empezar? ¿Has pensado hacer una selección de ellos pero hay algo que te impide dejarlos ir? En el post de hoy voy ha contarte cómo se revisan y ordenan los libros en el Método KonMari™, para que tengas una librería que te haga feliz y represente la persona que eres en este instante.
Los libros son la segunda categoría del método de Marie Kondo. Después de la ropa, es la categoría más fácil de ordenar, por lo tanto, deberías revisarla tras haber finalizado la anterior. Si acabas de llegar al blog y no sabes demasiado sobre el Método KonMari te recomiendo que leas estos dos artículos artículos, te ayudarán a ubicarte, especialmente si tienes interés en ordenar con este método:
Este artículo te servirá de guía. En él te hago un resumen del proceso paso a paso. En este otro, te explico cuales son las categorías, la importancia que tienen, y cómo seguir el orden propuesto te ayudará a completar tu proceso personal.
Vale, pues creo que con esto ya estamos preparadas para empezar con esta categoría.
PASOS PREVIOS
Al igual que en la categoría anterior, antes de ponerte a revisar los libros que tienes en casa conviene que prepares la sesión. Sólo será una ratito y te ayudará a agilizar el trabajo que harás después. Al igual que con la ropa, es importante que reúnas todos los libros y revistas que tienes en una misma estancia. Es decir, tienes que sacarlos todos de las estanterías y apilarlos en el suelo para que el día de la sesión puedas revisarlos cómodamente uno por uno.
Sé que puede darte un poco de pereza, quizá incluso pienses que no tiene mucho sentido, pues tal y como los tienes colocados en la estantería puedes ver perfectamente todo lo que tienes, y entonces ¿para que perder el tiempo sacándolos? Sin embargo, es imprescindible que tomes cada uno de ellos entre tus manos, sentir su peso, su vibración, su olor… Quiero que actives todos tus sentidos para conectar con el corazón y saber si te hacen feliz o no. Mirándolos de lejos simplemente tendrás la información que te den tus ojos y tu mente. Siento decirte, que la información que recibimos a través de ellos a menudo es engañosa.
Ok, ya has sacados los libros de casa. Y ahora, my dear, tienes que recopilar el resto de tus libros (si es que tienes más). Sí sí, estoy hablando de los libros y revistas que tienes en casa de tus familiares, en el garaje, en el trastero… Tranquila, los libros que has prestado a tus amiguis no hace falta que se los pidas de vuelta. Estos los revisarás cuando te los traigan, ¿sí? O igual que con la ropa, podemos poner la regla de que todos los libros que hayas olvidado de aquí a la sesión quedan directamente descartados ¿te atreverías?
Bromas aparte, puede que tengas dudas sobre los libros o revistas que tienes en tu despacho o los que estén directamente relacionados con tu trabajo. En este caso, dependerá del tiempo y esfuerzo que dediques a esta actividad. Es decir, si tienes un negocio consolidado o eres una emprendedora avanzada, quizá te merezca hacer un proceso completo dedicado sólo al negocio. Es decir, una vez hecho tu proceso personal con las pertenencias de tu casa, repetir todo el proceso completo (las 5 categorías) con todos los bienes relacionados con tu negocio. En cambio, si acabas de empezar o esa actividad es poco más que un hobbie, puedes revisarlos junto a las categorías de tu hogar.
Si tienes espacio suficiente en casa, te recomiendo que dejes los libros y revistas divididos en subcategorías. Así el día de la sesión lo tendrás todo preparado y ahorrarás energía.
QUÉ PERTENECE A ESTA CATEGORÍA
En esta categoría entraría todo lo que tiene forma de libro, desde libros de entretenimiento hasta los libros de consulta. Cómo te comentaba previamente, para agilizar el trabajo y no sentirte abrumada por las pilas de libros y revistas que tendrás acumulados ahora mismo en el suelo, te aconsejo que los dividas en subcategorías. Te voy a explicar cómo solemos dividirlo las Consultoras KonMari™ pero siéntete libre adecuarlo a tus necesidades. Lo más importante es que hagas caso a tu intuición, nadie mejor que ella te guiará durante este proceso.
Las subcategorías son:
- Libros generales: novela, comics, poesía, ensayo, teatro, biografía…
- Libros de referencia o consulta: libros sobre temáticas específicas (historia, política, economía, sostenibilidad, autoayuda, educación, medicina etc.) , enciclopedias, dicionarios…
- Libros visuales: libros de arte, libros de fotografía, libros de cocina, revistas (si tienes pocas)…
- Revistas (si tienes muchas revistas podrían ser una subcategoría en sí misma)
- Colecciones de libros…
Si tienes tiempo y ganas también podrías incluir en esta categoría*1:
- Libros o apuntes de los cursos/formaciones que hayas realizado recientemente
- Libros y apuntes de cuando eras estudiante o de cuando eras pequeña
- Libros de instrucciones
Si ves que incluso haciendo esta división las subcategorías son demasiado grandes, puedes hacer grupos más pequeños dentro de cada subcategoría. Es decir, por ejemplo, en el caso de los libro generales, pondrías todas las novelas juntas, los comics podrían ser otra categoría, los ensayos otra etc. O todavía más pequeño: las novelas negras por un lado, las novelas históricas por otro, las de ciencia ficción, las románticas etc.
La idea es agilizar el proceso de selección y que no pierdas el entusiasmo durante la sesión. Ve paso a paso, concentrada en la subcategoría que estás revisando en ese momento. No te preocupes por todo lo que queda, ya te ocuparás de ello cuando llegues.
*Estos también puedes gestionarlos en la categoría de Papeles si no tienes mucha documentación o no te parece demasiado complicado.
¡TODAY IS THE DAY!
Yeah ¡Ha llegado el día de la sesión! ¿No te mueres de ganas de ponerte a trabajar? Yo estoy ilusionadísima sólo de imaginarlo. Tal y como te dije en la categoría de ropa, planifica la sesión como si yo (u otra profesional) viniera a tu casa. En ese caso, estoy segura que habrías reservado la mañana y delegado tus ocupaciones en otras personas, ¿verdad? Pues si haces la sesión por tu cuenta igual. Reserva 5 horas (es lo que habitualmente dura una de mis sesiones), encuentra a alguien que se pueda ocupar de las personas que estén a tu cuidado, de tu negocio, de las mascotas (si las mascotas son un tema a la hora de ordenar, ya hablaremos de ello más adelante) etc. y pon el móvil en modo avión.
Además se supone que antes de esta categoría ya habrás ordenado también la categoría de la ropa. En ese caso, es importante que los que hayas descartado en esa categoría ya esté fuera de tu casa. Ya sabes a lo que me refiero, no vale arrinconarlo en el garaje, ¿eh? La idea es que vayas cerrando una etapa antes de comenzar con la siguiente.
Antes de empezar a revisar te recomiendo que hagas algún pequeño ritual que te ayude a enfocarte y mantener la concentración durante la sesión. Puedes hacer algunas respiraciones profundas, leer en alto lo que quieres conseguir a través de este proceso, enciende alguna vela o difusor con aceites esenciales… Hay millones de posibilidades, pero tienen que ser acciones de poco minutos porque quiero que exprimas la sesión al máximo.
Acuérdate también de tener a mano un cuaderno para ir apuntando todas las ideas, creencias limitantes y descubrimientos que vayas haciendo durante la sesión.
ELIGE EN BASE A LA FELICIDAD
Según Marie Kondo, los libros suelen estar como dormidos. Sí, lo sé, es una idea muy oriental y puede que te parezca un poco chocante, pero si lo piensas tiene su lógica. Los libros, una vez leídos pueden pasar meses, años e incluso décadas sin que nadie los toque o los mueva excepto para limpiarlos o quitar el polvo por encima. Por lo tanto, su energía está como apagada y es difícil que te transmitan felicidad. Por ello, antes de ponerte a revisarlos uno por uno, Marie Kondo recomienda que les des unos toquecitos con los dedos o los nudillos. Ve tocando los libros como si fuera la puerta de tu felicidad, pon la intención de despertar a tus libros.
Ahora sí, siéntate frente a la pila de libros dejando espacio detrás de ti para los libros que elijas y descartes. Empieza siguiendo el orden de las subcategorías que te he mencionado. O si te sientes más cómoda, elige la subcategoría que te parezca más fácil.
Ve cogiendo uno por uno cada libro y acércatelo al corazón. ¿Qué te dice? ¿Cómo te sientes? ¿Qué recuerdos te mueve? ¿Representa la persona que eres hoy en día? ¿Está relacionado con tus intereses?
Recuerda la importancia que tiene escuchar a tu corazón e intenta ser lo más sincera posible contigo misma. Hace unos años, a raíz del boom de la serie de Netflix “Tidying up with Marie Kondo” se extendieron muchos bulos y memes sobre este tema. Uno de ellos decía que no se pueden tener más de 30 libros en casa por persona. A pesar de que en la versión española de su primer libro hace alguna referencia a ello, puedo asegurar que la opinión de Marie Kondo hoy en día es completamente distinta. Lo que importa es la calidad y no la cantidad. Es decir, que los libros que elijas, independientemente de su número, sean los que realmente están cerca de tu corazón, te hagan feliz o conecten con tu esencia.
AGRADECE ANTES DE DESECHAR
Tal y como te comenté en el artículo de cómo organizar la ropa, es muy importante agradecer antes desechar tus pertenencias. El agradecimiento te ayudará a desapegarte de los libros que no te hacen feliz o ya no necesitas más, y a dejarlos ir. Para ello te recomiendo que cada vez que descartes un libro repitas para tus adentros una frase del tipo:
“Gracias ……………… (el libro que sea), por la función que has cumplido para mí ya que me has enseñado ………………………. (lo que te haya aportado el libro). Ahora te dejo marchar para que seas útil de otro manera y cerrar este ciclo”
¿Qué tal vas? ¿Cómo ves esta segunda categoría? Espero no haberte aturullado con tanta información. Sé que he repetido algunos consejos en varios artículos, por un lado porque el proceso en cada categoría es similar aunque cada uno tenga sus particularidades. Y por otro, porque si has decidido hacer la maratón del orden por tu cuenta, como no voy a estar a tu lado me parece importante que los vayas interiorizando poco a poco.
Para no infoxicarte demasiado, dejaré para la semana que viene la segunda parte de esta categoría. ¿Te parece? De todos modos, si ya estás ordenando los libros y necesitas la información antes, no dudes en escribirme. Me hace muy feliz poder ayudarte en todo lo posible durante tu proceso.
Un abrazo
Hola. Estoy intentando organizar mi casa. Ya hemos logrado el tema ropa. Ahora pasamos a los libros. Con mi marido llevamos más de 40 años de casados. El siempre compró libros, yo menos. Tenemos cientos de libros. En la biblioteca del living, en el.escritorio, en dos dormitorios, en el garage. Es una categoría en la que no puedo ponerme de acuerdo con él. No quiere deshacerse de ninguno!!! Que hago??? Estoy frenada, no puedo avanzar!!!
Hola!
La verdad es que no es fácil ordenar la casa y que todas las personas que convivís en ella esteis de acuerdo en todo. De hecho, mi experiencia es que normalmente la necesidad de poner orden, y en este caso, realizar el proceso KonMari, suele ser principalmente de uno de vosotros. En ese sentido, mi recomendación es siempre respetar los ritmos personales de cada uno.
Me explico. Es imposible que dos personas tengan la misma necesidad, en el mismo momento y de la misma manera. Intentar convencer o arrastras a la otra persona hacia algo, por muchos beneficios que pueda recibir, es contraproducente. En tu caso, intentar ‘obligarle’ (lo pongo entre comillas porque sé que es una palabra fuerte y un poco exagerada, pero que para lo entiendas) a que se deshaga de sus libros cuando esa iniciativa realmente no parte de él, solo creará rechazo y tensiones entre vosotros.
Por lo tanto, mi recomendación es siempre empezar por tus espacios personales, es decir, ordenar aquello que es tuyo, sólo tuyo. Esto es fácil sobre todo con la ropa, los libros e incluso muchos documentos. Después cuando llegueis a lo que es común (cocina y baño sobre todo) tendréis que hablar mucho y poneros de acuerdo en cómo vais a proceder.
Pero, volviendo a la categoría que nos concierne, te diría que tú revises, selecciones y ordenes esos libros que son sólo tuyos. Aunque sean poquitos notarás diferencia. Verás que si tu haces tu proceso de orden completo, te quedas con aquello que te hace feliz, lo pones ordenado y bonito… La necesidad de orden se contagiará. Todos queremos vivir mejor, así que seguro que con el tiempo y sin que tú tengas que presionarle, poco a poco tu marido también empezará a deshacerse de los objetos que le sobran.
Sé que la respuesta que te estoy dando no es una solución inmediata y que requiere paciencia. Pero a largo plazo los resultados serán mucho mejores ^_^
Animo y un abrazo