¿Te has parado alguna vez a reflexionar sobre qué te roba la paz mental? En esta sociedad en la que vivimos a un ritmo tan acelerado, con tantas actividades y quehaceres, donde recibimos tantos estímulos a todas horas, hablar de paz mental parece abstracto. Un lujo inalcanzable.
Hace unos días, en uno de esos momentos en que iba a mil revoluciones me pille con un pensamiento que duró una fracción de segundo pero fue muy revelador: ‘y si llegara otra pandemia y nos encerraran en casa otra vez, pero esta vez cayera también internet… ¡QUÉ PAZ!’. Por supuesto, no quise entrar en todos los aspectos negativos que traería semejante suceso y realmente no es algo que quiero que pase. Sólo de invocarlo se me ponen los pelos de punta. Fus-Fus. Pero si hay un punto de añoranza del silencio, la quietud, del cambio de ritmo..
Cuando se habla de la organización de la casa, me encuentro con personas que anhelan esa tranquilidad y bienestar en su hogar pero me dicen cosas tipo:
Uyyy en mi casa no descanso, siempre hay cosas que ordenar.
A veces me gustaría cerrar la puerta y no volver, siento que me ahogo con todo lo que hay que hacer en mi casa.
Ordenar… ¡qué pereza! No sabría ni por dónde empezar.
Estoy esperando a la próxima la mudanza -próxima obra, cambio de temporada, whatever- para tirar todo lo que me sobra…
Y así la mayoría va tirando con la casa como está, parcheando la situación lo mejor que puede, pero sin un cambio verdadero. Por ello, con este artículo quiero invitarte a reflexionar sobre las consecuencias que tiene la falta de orden en tu bienestar.
En casa ¿cuáles son los ladrones de tu paz mental?
Se me ocurren unos cuantos… Por ejemplo, el armario de la ropa. ¿Cómo está tu armario? Lleno de ropa, con las prendas colgadas tan apretadas que cada vez que intentas coger una camisa se te engancha con la de al lado, en las baldas aunque esté todo a la vista no eres capaz de encontrar la mitad y siempre acabas eligiendo el jersey que está encima para que no se desmorone el montón… Y lo peor… ¡nunca tienes nada que ponerte, siempre vas con lo mismo!
Pasa lo mismo en la cocina. Tu propósito después del verano fue retomar las rutinas, volver a comer sano, dejar de sentirte con hambre y al mismo tiempo hinchada todo el día. Sin embargo, cuando entras a la cocina tienes siempre la encimera llena de trastos, en la despensa no tienes espacio, intentas cocinar y no encuentras los utensilios…. Todo ello no te ayuda a cuidarte sino a salir del paso con lo que sea.
¿Y el baño? ¿Te imaginas tener el baño ordenado y que tan sólo encendiendo un par de velitas puedas montarte un mini-spa en casa? Pero claro, tal y como está, con cientos de botes de productos de por medio, todos a medio gastar, en los cajones todo remezclado… Es imposible encontrar un momento de calma.
Si trabajas desde casa tienes un reto añadido. Depende cómo tengas la mesa de trabajo, este puede ser un gran aliado o enemigo en tu trabajo. Tener tus objetos y documentos ordenados hace que puedas trabajar con comodidad, sin distracciones y de forma más eficiente. Parecen tonterías pero tener que andar buscando entre miles de papeles y carpetas, encontrarte siempre con ese bolígrafo que pinta a medias, sentir que no tienes suficiente espacio en la mesa para desplegar tus ideas… Todo ello te roba minutos de trabajo y eleva tu nivel de ansiedad.
Desde mi punto de vista la casa es un espacio de intimidad, un espacio para ser tú misma; también un refugio en el que recuperarte de todas las emociones (altas y bajas) que has vivido y reconfortarte para poder afrontar el siguiente día.
¿Qué necesitas para crear este espacio gustoso, tranquilo y de bienestar?
1// PONER CONCIENCIA
Para poder crear un espacio en el que tengas paz mental es imprescindible que seas consciente de todo lo que tienes y, por lo tanto, de todo lo que te sobra. Ordenar la casa te va ayudar a reconocer tus pertenencias, elegir aquellas que tienen sentido o estén alineadas contigo y deshacerte de lo que resta en tu vida.
2// VER TODO EL POTENCIAL
No hace falta hacer grandes inversiones o esperar al momento ideal (tener el armario adecuado, tu propia casa, todo el tiempo del mundo…). ¿Te apetece vivir en una casa en el que realmente te sientas bien? Está al alcance de tu mano. Vamos a nutrir esa ilusión a la vez que aceptamos la realidad (tu aquí y ahora). Te aseguro que si cuidas tu casa, eliges lo que te hace feliz, la pones bonita… Tu misma vibrarás desde otro lugar y eso se transmitirá al resto de personas que viven contigo (y de paso le mandarás un mensaje alto y claro al universo).
3// ORDENAR POR CATEGORÍAS
A la hora de ordenar tu casa, te invito a que lo hagas siguiendo las categorías del método KonMari®. Hacerlo por categorías es la única manera conseguir organizar la casa y que el orden se mantenga en el tiempo. Estoy segura de que te llevarás más de una sorpresa.
4// QUEDARTE CON LO QUE TE HACE FELIZ
Uno de los comentarios que más repiten las personas que acompaño es que después de hacer el proceso se sienten ligeras, tranquilas, con más foco y energía. El festival del orden te da la oportunidad de deshacerte de lo que te sobra, te pesa y ocupa (a nivel material y también mental), cerrarás etapas, colocarás tus vivencias, emociones y relaciones en un lugar más saludable. Una de las claves más importantes del método KonMari®, es que se centra en lo que te hace feliz y no tanto en lo que te sobra o tienes que tirar. Es sencillo ¿verdad? Pues no imaginas el cambio de paradigma que supone.
5// ORDENAR DE MANERA SENCILLA Y EFECTIVA
A pesar de que la respuesta más sencilla suele ser la más adecuada, tendemos a complicarnos la vida creyendo que un sistema elaborado nos dará mejores resultados. Lo veo una y otra vez en las casas que ordeno, especialmente en algunas categorías como los documentos: carpetas dentro de carpetas, demasiadas subcategorías, decenas de etiquetas… Te invito a que busques la sencillez siempre. A través del método KonMari® te propongo un modo de orden sencillo, natural y personalizado a tus necesidades.
Realizar el proceso KonMari® te llevará de lo superficial a lo profundo, de lo material a lo emocional, de fuera hacia dentro para que vivas una transformación profunda en tu hogar y en ti misma y encuentres la paz mental y el bienestar que tanto te mereces.
Un abrazo💕
Sara